domingo, 3 de febrero de 2008

La III Guerra Helena. La Batalla de Maratón

Protagonistas


Darío I


Darío llega a trono con una serie de acontecimientos repentinos.Tras la muerte repentina de Cambies II ( 522 a.C) y la usurpación del mago Gaumata, Darío hijo de Histaspes, sátrapa de la región de Persia, se convirtió en el septimo rey aqueménide. Aunque una vez en el trono tuvo que hacer frente a una serie de rebeliones instigadas por los pretendientes a la corona, se puede afirmar que todas las provincias del imperio estuvieron implicadas. siguiendo los pasos de sus predecesores, inició una dinámica campaña de expansión, enviando expediciones al Punjab y a las costas del Golfo Pérsico, alrededor del 52 a.C..

A traves de la guerra con los escrictas, anecxiono Tracia, sometiendo al rey de Macedonia y construyendo un puente sobre el Danubio. A raíz de esta campaña, las ciudades griegas de Jonia , se rebelaron, solicitando ayuda a Atenas. Dicha revuelta fue reprimida con dureza, lo que llevo a Dario a llevar la guerra hasta el interior de Grecia.

Milcíades


Milcíades II el Joven, fue un politíco y general ateniense de la familia de los Filaidas. En un primer momento este se situo al lado de los persas, pero rapidamente se inclinó hacia los rebeldes jonios. Esto le llevo de regreso a Atenas y a raiz de la elección de Temístocles como arconte, fue nombrado estratega y aconsejó el acercamiento a Esparta, para vencer a Darío.



Prolegómenos

La revuelta jonia comenzó en el 499 a.C., cuando Aristagoras intentó apoderarse de Naxos, al fallar en el intento y ante la represión por parte de Daró, solicito ayuda a Esparta sin exito, lo que le llevaría a solicitar después el apoyo a la flota Ateniense. Esta última respondió enviandole 20 naves, y la ciudad de Eubea le enviaria otras 5 mas.Con esta ayuda los griegos realizaron un ataque a Sardes sin conseguir conquistarla.

Darío llevo a cabo su plan de expansión. Hacia el 500 a.C., Lemnos y Imbros fueron conquistadas por los persas, anexionándolas Milciades. Lemnos había sido conquistada en el 512 a.C. por Ótanes, quien habia nombrado gobernador a Licareto.
La incursión de los escritas motivo su marcha en el 495 a.C., ante el avance del rey persa Dario una vez había cruzado su ejército de Asia a Europa, los escitas se dirigieron al Quersoneso y intentaron convencer a los griegos de Jonia encargados por Darío de la custodia del puente, que habian derrotado a los persas sobre el río Istro, a cortar el puente y a que se desvincularan de los persas. Tambíen propuso Milciades que no dejaran escapar la ocasión de liberar a Grecia, ya que ante una posible derrota persa los habitantes de Asia se se sublevarían contra los persas. Ante la negativa de la mayoría de ciudades de secundar su plan y recibir noticias que los fenicios (aliados de los persas) se hallaban en Ténedos, Milciades huyó y zarpó de Cardia con 5 trirremes y sus riquezas rumbo a Atenas. Este consiguió refugiarse en Imbros con 4 trirremes. Al mando de la nave capturada estaba Metíoco, que fue conducido ante Darío, el cual le concedió todo tipo de bienes y un esposa persa, considerando a sus descendientes de pleno derecho. Milcíades se trasladó a Atenas.

Darío ante el fracaso de la invasión de Escita, nombro generales a Datis y artrafemes paraque atacaran Escitia y Atenas, con la justificación en el caso de esta última, que los jonios habian tomado Sardes gracias a su ayuda. Estos generales conquistaron Eretria y deportando a sus habitantes al territorio asiático del imperio persa.

La Batalla de Maratón

Tras someter a los rebeldes de Jonia, Darío intento la conquista de una parte de la Grecia continental, para así poco a poco ir afianzando gradualmente su dominio sobre los pueblos helenicos.
Darío tenia especial interes en Atenas , ya que habian ayudado a los jonios. Este tenia dos opciones de invasión, que implicaban cruzar el estrecho de los Dardanelos. La primera consistía en embarcar un ejército masivo y desembarcarlo en el continente, con la posibilidad de que los griegos aprovecharan ese momento para asolar sus ciudades costeras o atacar con fuego sus naves, y la segunda cosistía en crear un puente de barcazas unidas por las que desfilaria su ejército de manera segura hacia la conquista. Sus generales le aconsejarón la primera, pero se desato una tempestad y varios miles de hombres murierón al caer al agua y no poder nadar por la pesada indumentaria.

Dos años ,más tarde lanzo de nuevo otra expedición, apuntando más al sur el desembarco, esta vez en las playas de Maratón. En los años previos habia enviado emisarios a las ciudades griegas solicitando la sumisión o la destrucción, aceptando muchas ciudades a excepción de Atenas.
La flota persa navegó transportando un ejercito de infantes y caballería a traves del Egeo, consiguiendo que muchas islas griegas se sometieran , excepto Eretria, que fue sitiada, y los ciudadanos creyendo que les respetarian les abrieron las puertas, pero fue saqueada, destruida y los supervivientes esclavizados.
A finales del 490 a.C., la flota llegó a Maratón, a unos 42 km de Atenas. Los atenienses les habían enviado emisarios a Esparta pero estos aun no habían partido. Aunque de camino a la batalla se les unieron unos 1000 platatios, el total de sus hombres en edad de combatir.
El ejército ateniense tomó posiciones en el valle del Vrana,y vieron que la proporción era 3 a 1. Los generales estaban divididos entre atacar o esperar a que los persas hiciesen el primer movimiento, temían más a la caballería persa que a sus temibles arqueros, los griegos fueron informados de que la caballería persa aun no había desembarcado. Entonces el general Milciades dispuso un centro débil y reforzó sus alas, ideando una táctica que si se seguia al pie de la letra resultaria vencedora.

Los persas tenian mejor formación defensiva, en cambio en los griegos era ofensiva, siendo la arma principal de estos últimos la lanza larga, acorazados con yelmo, escudo, coraza y espinilleras, hacian de su formación de combate, la falange, muy favorable en el combate a corta distancia. No disponían ni de caballería, ni de arqueros.


Milcides atacó al alba, 11.000 hombres atacaron, retrasandose las alas conforme la planficación afectuada. Los persas esperarón y sus arqueros comenzarón a disparar en párabola nubes de flecha, que no alcanzarón a la primera línea ateniense. Tras muy poco tiempo de batalla el centro griego, inició la retirarda de acuerdo con el plan previsto, haciendo salir a la infantería persa en persecución. Los griegos se retiraron de la batalla, haciendo estirarse a los persas y dejando a los arqueros sin protección de la infantería. Seguidamente las alas griegas se cerraron sobre los flancos de infantería persa, mientras que el centro que huía se anclo, fuera de la línea de los arqueros. Los persas intentaron retroceder y lo que había empezado con persecición terminó en huida.




















Los persas perdieron unos 6400 hombres y el bando griego solo contó con 192 bajas. Atenas había vencido, pero no destruido al ejercito persa.
Sabiendo que los persas podian atacar la diudad ahora sin guarnicones, enviaron a un emisario para avisar a la ciudad, entonceslos ciudanos rondaron el pireo armados simulando que la ciudad estaba bien guarnecida hasta el regreso del ejército. Efectivamente la tropa persa divisó la ciudad y al creer que estaba bien guarnecida se retiro.

sábado, 2 de febrero de 2008

Adriano


Introducción

Publio Elio Adriano, Publius Aelius Hadrianus (24/01/76 d.C. -10/07/138 d.C.), emperador romano (11/08/117 d.C.-10/07/138 d.C.). Sucesor de Trajano, perteneció a la tradicionalmente llamada dinastía Antonina . Adriano nació en una familia originaria de la ciudad de Hadria (Itálica).Adriano perdió a su padre y fueron designados sus tutores legales su tío segundo, Trajano, y el Publio Acilio Atiano.
Fue designado en el 100 d.C. para el cargo de cuestor, como candidatus de Trajano. En 101 d.C., marchó con Trajano a Dacia, en calidad de comes Augusti, con motivo de la Primera Guerra Dacia, pero no se estuvo a su lado toda la campaña, sino que regresó a Roma, donde ejerció el cargo de tribuno de la plebe. En 105 d.C., regresó a Dacia para servir a las órdenes de Trajano, esta vez con el mando de una legión, la I Minervia, en la Segunda Guerra Dacia. Al término de la guerra, fue nombrado gobernador de Pannonia Inferior.
Hacia 110-111 d.C., viajó a Grecia, donde conoció a Eplicleto y tomó influencias griegas. En 113d.C., acompañó a Trajano en su expedición contra el Imperio Parto.
En época de las Guerras Párticas de Trajano, era gobernador de Siria. Tras la muerte de Trajano, la emperatriz Plotina aseguró que Adriano había sido adoptado como hijo por Trajano en su lecho de muerte. Su nombramiento fue inmediatamente seguido de la ejecución sumarísima de cuatro importantes excónsules, exponentes de las conquistas militares de Trajano. Estas ejecuciones, de las que Adriano siempre responsabilizó a su antiguo tutor, se llevaron a cabo sin el acuerdo previo del Senado, y provocaron un distanciamiento entre el emperador y este. Esto pudo marcar la política imperial subsiguiente, que fue dirigida en el sentido de ampliar la base de apoyo del Principado en detrimento de Roma, mediante el contacto directo del emperador con las elites provinciales, en oposición a la vieja política del mantenimiento de Roma como ciudad imperial y hegemónica.

Política militar

Adriano estaba contra la política de conquistas emprendida por Trajano, por lo que sus primeras medidas como emperador tendieron a abandonar definitivamente cualquier tentativa de preservar las conquistas inseguras realizadas por su predecesor en su última expedición contra el Imperio Parto. Conquistas éstas que el propio Trajano había sido forzado a abandonar tras una serie de reveses militares. Favoreciendo una política de defensa pasiva, Adriano también abandona parte de las conquistas de Trajano en Dacia, actual Rumanía, cediendo a los sármatas la planicie del Bajo Danubio y concentrando la ocupación romana en la región de Transilvania, protegida por la barrera natural de los Cárpatos.

También ordenó la demolición del puente construido por Trajano sobre el río Danubio, como forma de evitar una invasión de las provincias danubianas a partir de Dacia.

Poco después del 115 d.C., los nativos se sublevaron contra sus conquistadores y aniquilaron a las guarniciones romanas de Eboracum (ahora York).Como resultado, el emperador romano Adriano visitó Britania en el 122d.C. y comenzó la construcción de una muralla de 117 km, que se extendía desde el estuario de Salway, en el mar de Irlanda, hasta la desembocadura del río Tyne. Aún se conservan fragmentos de este muro, conocido como muralla de Adriano. Veinte años más tarde, se construyó otra línea defensiva, llamada la muralla de Antonino, en la parte más estrecha de la isla, desde el estuario de Forth al estuario de Clyde. La muralla marcó la frontera romana durante los siguientes doscientos años, un periodo de paz relativa. Restos de la muralla de Adriano

Política interior

Fue un gran admirador de la cultura griega, siendo uno de los responsables de la propagación del helenismo del mundo antiguo. Hizo grandes viajes por el imperio, realizando obras y mejorando las infraestructuras y la economía de las provincias.
Ordenó la construcción del Panteón de Roma, reconstruido sobre otro previo, erigido por Agripa, pero manteniendo la fachada arcaica con el nombre del antiguo benefactor. La construcción estuvo a cargo de Apolodoro de Damasco. En Tívoli mandó edificar su villa imperial, la villa de Adriano es una de las más famosas construcciones romanas. Panteón de Agripa
Fue un emperador viajero y, por donde pasaba, levantaba ciudades, construía calzadas, erigía monumentos. Estos monumentos tenían un significado político: su construcción generalmente significaba una alianza en pie de igualdad abstracta entre Roma y la ciudad donde se construían. Así, mandó terminar la construcción del templo a Zeus en Atenas, el "Olympieion". El resultado de estas construcciones fue organizar un barrio al modo romano de urbanizar, de manera que él pudiera igualarse al fundador mítico de Atenas, Teseo. Esta Atenas "romana" estaba separada de la antigua ciudad por un pórtico en la entrada, en el que había inscrito: "Esta es la ciudad de Adriano, y no la de Teseo". Esta política encontraría su mayor contestación entre un pueblo que había opuesto históricamente la mayor resistencia a esta matriz cultural griega, Judea. Para muchos historiadores el gobierno de Adriano fue la era Dorada del imperio romano por entontrarse su periodo entre los conflictivos tiempos de los primeros emperadores y la decadencia del imperio ante las invasiones bárbaras de los siguientes emperadores.

La revuelta judía

Los judíos se reunieron preparando una nueva revuelta contra el elemento greco-romano. La revuelta estalló cuando Adriano mandó reconstruir Jerusalén, como una ciudad griega. Esto fue considerado por los judíos como una profanación de su ciudad por los extranjeros. Durante el final del reinado de Adriano, un movimiento armado anti-romano sacudió el interior de Judea.
En cuanto Adriano supo del levantamiento de los judíos, ordenó que las legiones de las provincias vecinas atacasen a los judíos y los destruyesen. No se sabe con certeza si Adriano participó activamente en la guerra judaica ni en qué medida, lo que sí es cierto es que esta guerra fue larga, cruenta y terrible, durando más de dos años. Los judíos fueron acorralados poco a poco en sus refugios subterráneos de las montañas, donde fueron diezmados. Los sobrevivientes fueron vendidos como esclavos. Roma decretó la expulsión de los judíos de Jerusalén, que fue reconstruida como ciudad griega pasando a llamarse Aelia Capitolina.En el emplazamiento del Templo se erigió la estatua de Zeus y junto al Gólgota donde fue crucificado Jesús, se levantó un templo dedicado a Afrodita. Se eliminó la antigua provincia de Judea redefiniéndose sus limites y creando la provincia de Syria Palaestina, forma de intentar apagar la memoria de la presencia judaica en la región, cambiándola por el nombre de sus más antiguos habitantes, los Filisteos. La guerra eliminó cualquier posibilidad de renacimiento de un judaísmo como expresión puramente política y no sólo religiosa y cultural, situación que se perpetuaría hasta el surgimiento del sionismo en el siglo XIX.

Sucesión de Adriano

La sucesión de Adriano fue complicada. En principio había pensado adoptar como hijo y sucesor a uno de sus muchos antiguos favoritos (como el adolescente griego Antinoo), y a veces instaba a sus amigos a proponerle los mejores nombres, pero, tras la muerte prematura y repentina el 1 de enero de 138 d.C., de su heredero designado e hijo adoptivo, Lucio Ceionio Cómodo (rebautizado a mediados de 136 como Lucio Elio César), Adriano, ya con poco tiempo decidió adoptar al probo senador Titus Aurelius Fulvus Boionius Arrius Antoninus, que de emperador vendría a ser conocido como Antonino Pío. Le impuso la condición de que adoptase a su vez, como hijos y sucesores, al sobrino de su mujer y pariente de Adriano, Marcus Aurelius Verus, de la gens Annia bética, el futuro emperador Marco Aurelio y a Lucio Vero II, que vendría a ser co-emperador junto con Marco Aurelio. Los tres tuvieron que pasar legalmente, junto con todos sus bienes, a la gens Aelia, la de Adriano, obligados mediante una lex adoptionis.Mientras tanto, Adriano, ordenó ejecutar, u obligó al suicidio, a sus dos parientes vivos más próximos: a su cuñado, Serviano, del que desconfiaba por creer que buscaba la sucesión imperial para su nieto Cn. Pedanio Fusco Salinator, y a éste mismo. Esta decisión agravó el distanciamiento entre Adriano y el Senado, que a su muerte intentó invalidar todas sus disposiciones, lo que fue impedido por Antonino. Ésta es la causa más plausible de que fuera llamado en adelante con el epíteto de Pius, especialmente utilizado entre los romanos para las manifestaciones de piedad familiar.
Poco después de la triple adopción formal Adriano murió en efecto, el 10 de julio de 138, a los 62 años de edad, retirado en la villa imperial de Baiae, cerca de Nápoles.